martes, 31 de enero de 2012

Los Foraneos de Selección

La selección Colombia a lo largo de la historia se ha caracterizado por tener a directores técnicos del país. Es más, de los treinta y seis ciclos que ha tenido el combinado patrio nada mas podemos contar a once foráneos a cargo. De esos, solo cinco (contando el actual) son argentinos y el último en ejercer dicho cargo abandonó hace más de tres décadas. Se tiene que decir que estos han ayudado mucho al progreso de la selección colombiana, especialmente al comienzo de esta. Con la llegada de José Néstor Pekerman a la tricolor se cortan más de treinta años con adiestradores nacionales y se espera con él volver a la cita orbital tras ver los últimos tres mundiales desde la televisión. 

El argentino Fernando Paternoster fue el segundo técnico del conjunto cafetero, el primer extranjero en dirigirla y también quien hizo debutar a los nuestros. Fue en los IV Juegos Centroamericanos y del Caribe en donde el plantel del Deportivo Municipal (antecesor de Millonarios) nos representó en Panamá. El calendario marcaba el 10 de febrero de 1938 y México nos dio la bienvenida con un 3-1 en contra. A continuación dos victorias para terminar con el bronce en las justas y con una experiencia positiva en nuestra primera aventura a nivel de selecciones. Trece días en el cargo duró el entrenador gaucho.

El primer título de la tricolor llegó en 1946 cuando se coronó campeón en la siguiente edición del torneo mencionado en el párrafo anterior, aunque esta vez bajo el mando del peruano José Arana Cruz. Este se desarrolló en Barranquilla y se consiguió a la medalla de oro de manera invicta derrotando a las selecciones de Curazao, Venezuela, Guatemala, Puerto Rico, Costa Rica y Panamá.

Luego vino una década en donde la selección merodeaba por las Copas América con una muy poca producción en donde su mejor posición fue un quinto lugar. Ya después de foguearse continentalmente decidió que era la hora de que el mundo entero los conociera. Suecia 58 fue el primer intento, pero quedamos fuera en las eliminatorias.

Para Chile 62 se trajo a un histórico ex - jugador como Adolfo Pedernera, quien fuera figura de Millonarios en la época del dorado. El argentino logró la misión de llevar a Colombia a su primera cita orbital aunque no con los resultados esperados en este. Unas sendas derrotas por 2-1 y 5-0 ante Uruguay y Yugoslavia (Serbia en la actualidad) respectivamente le quitaron las esperanzas al conjunto patrio, los cuales no se fueron con las manos vacías. En el último partido del grupo empató con la ya desaparecida U.R.S.S por 4-4 y logrando hasta la fecha el único gol olímpico en la historia de los mundiales por intermedio del barranquillero Marcos Coll. Además, le convirtieron cuatro goles al mítico Lev Yashin, la famosa araña negra.

Apareció una sequía futbolística hasta que en 1975, bajo el mando de Efraín “el caimán” Sánchez, se perdió la final de la Copa América ante Perú en tres partidos. Antes de Sánchez estuvo el serbio Todor Vaselinovic, quien fue al primer entrenador al que se le dio más de un año para dirigir a la selección. Posterior a este subtítulo llegó otro serbio, Blagoje Vidinic, quien para ese entonces fue el adiestrador nacional que duró más tiempo en el puesto y es uno de los que ha tenido mayor continuidad a lo largo de la historia. 

Inmediatamente después trajeron a Carlos Salvador Bilardo. El argentino venia de dirigir al Deportivo Cali, a quien llevó a la final de la Copa Libertadores de 1978 y tenían la intención que fuera él quien nos clasificara España 82. El resultado fue negativo y tras esto nada mas accedieron a la selección técnicos colombianos. 
En la década del 90 llego lo mejor de nuestra historia futbolística. Por un lapso de once años estuvimos en la élite. Llegamos a jugar tres mundiales consecutivos, a golear a Argentina en su casa y a ganar la Copa América. Ese último tituló sepultó esos momentos dorados, que alcanzaron a brillar otra vez de a poco en la Copa Confederaciones del 2003.

Desde entonces hemos sido una selección sin rumbo, sin ideas, sin una base y con una cabeza que cambia constantemente. Llega José Pekerman, un señor serio y correcto, que tiene una gran experiencia, tanto en selecciones mayores como juveniles. A él le encomendamos una gran camada de jugadores y un sueño. Un sueño llamado Brasil en donde, si los Mayas nos lo permiten, esperamos estar presentes en el 2014.

martes, 24 de enero de 2012

De Santa Marta para el mundo

El ‘Pibe’, Carlos Vives o Gabriel García Márquez son unos de los personajes más ilustres, no solo del Magdalena, pero de toda Colombia. Han puesto al departamento colombiano en el mapa mundial debido a su gran talento que ha cautivado al planeta entero. Pero el samario que hoy en día está en boca de todos, y que lleva en alto la bandera de Colombia es Radamel Falcao García.

El tigre es de esos delanteros de los que el área es su hábitat natural y el gol es su presa favorita. Este fin de semana convirtió su sexta tripleta como profesional y es, después de Messi y Cristiano Ronaldo (quienes deberían estar fuera de concurso), el delantero de moda en Europa. Su fichaje por el Atlético de Madrid revolucionó la liga española, ya que el club colchonero pagó cerca de 40 millones de euros por los servicios del colombiano, quien tenía como obligación hacer olvidar con goles al Kün Agüero, Diego Forlán y Fernando Torres, ídolos rojiblancos. Un jugador que ha dejado huella en todos los equipos donde ha jugado, siendo la selección Colombia su único lunar. Pero la historia del 9 empezó mucho antes.

El 10 de febrero de 1986 en Santa Marta, Colombia, Radamel García padre decidió ponerle a su primogénito su mismo nombre y agregarle el Falcao en honor al histórico jugador de la selección brasileña y de la Roma. Ese día, sin saberlo, nació una figura de nivel mundial.


Su nombre se conoció nacionalmente el 28 de agosto de 1999, fecha en la cual debutó con el ya desaparecido club Lanceros por un partido de la Primera B. Con 13 años estableció un record de precocidad en el fútbol colombiano. El primero de muchos. Un año más tarde marcó su primer gol con este mismo equipo, en la victoria 2-1 sobre el Cóndor. “Gracias a Dios logramos ganar y frente a un público que nos está acompañando bien” fueron las primeras palabras del depredador colombiano.

De aquí pasó a Millonarios, en donde permaneció en las inferiores hasta que decidió emigrar a Argentina, no sin antes desechar una opción del Ajax de Holanda, una de las mejores canteras del mundo. Velez Sarsfield fue su primera escala, en donde no logró mostrar todo su potencial. Caminó unas cuadras hasta llegar a River Plate. En las arcas millonarios lograron ver su poderío y decidieron hacerse con sus servicios. El calendario databa el 2001 como el año en que firmó contrato con el club de la banda cruzada.

Su debut en tierras gauchas se dio cuatro años más tarde, momento en el cual ya había sido campeón del sudamericano sub-20 con la selección Colombia. Tardó seis meses más para consolidarse y el Apertura 2005 fue su despertar, ya que marcó 7 goles en 11 partidos. El tigre comenzaba a rugir. Pero durante la pretemporada siguiente pasó lo peor. Una lesión de ligamentos lo obligó a separarse de la cancha por más de seis meses y cortar su progresión.


Le costó un poco volver, pero a medida que le dieron confianza, este la retribuyó con goles. Fue una época gris para River, pero Falcao, con actuaciones como la de su heroica tripleta ante el Botafogo por la Copa Sudamericana o su gol en el Superclasico, comenzó a ganarse el corazón del hincha millonario. Los rugidos del tigre comenzaron a sonar y muchos equipos europeos trataron de llevárselo, pero los argentinos dijeron que no era el momento. Y acertaron. Poco tiempo después salieron campeones, para ser más exactos, en el Clausura 2008. Vinieron varios torneos con altibajos para la gallina, pero el samario seguía encendido. Para julio del 2009 la banda no pudo retenerlo más y lo vendieron por 5.5 millones de euros al Porto.

Al club luso llegaba con la dura misión de reemplazar a Lisandro López, la cual cumplió y superó con creces. 34 goles en 42 partidos más la supercopa y la copa de Portugal y el botín de oro en esta, fueron los resultados de su primera expedición europea. Muchos se preguntaban ¿tras esta gran temporada, podrá mejorar? La respuesta fue positiva, y de qué manera.


El colombiano marcó en la temporada siguiente 39 goles, incluidos los 17 goles de la Europa League (antigua Copa UEFA) mas otro de la previa de dicha copa. Estos goles además de servir para alzarse con el segundo trofeo continental más importante de Europa, lo colocaron como el goleador histórico en una sola edición de este torneo, superando al gran Jurgen Klinsmann. Los cuatro goles en la ida de las semifinales ante el Villareal y el único gol en la final son muy recordados por los hinchas del Dragão.

Tras un montón de rumores el tigre decidió llevar sus rugidos a España, y convertir el Vicente Calderón en su nueva casa. Se convirtió en el colombiano más caro, el fichaje más costoso del Atlético de Madrid y la venta más jugosa del fútbol portugués (¿Nada mal ah?) A la fecha ya tiene mejores registros que los últimos delanteros del Aleti, y se convirtió en ídolo de la afición, un idilio que espera seguir manteniendo y, como hasta ahora, continuar llevando, con humildad y sencillez, el nombre de Santa Marta y de Colombia en alto.

miércoles, 18 de enero de 2012

Destino Europa

Los jugadores colombianos siempre han tenido los mismos problemas cuando van al exterior. Cuentan con grandísimas condiciones, pero al salir del país siguen pensando que la cultura es igual que en Colombia y, por indisciplina o por extrañar a sus familias, amigos y su casa, terminan desperdiciando un gran talento.
Tal vez el caso de más renombre en nuestro fútbol es el de Faustino Asprilla. El Tino pudo llegar a ser uno de los mejores jugadores de la historia, que un mejor equipo se fijara en él y ganar más títulos. Pero no lo fue porque, como dijo el periodista Mauricio Silva, "Asprilla no quiso ser el mejor jugador del mundo".
Su vida excéntrica, llena de alcohol, mujeres y demás aventuras, impidió al delantero colombiano tener una carrera más extensa y exitosa. Un hat trick con el Newcastle ante el Barcelona y dos copas UEFA y una Supercopa de Europa con el Parma son la punta del iceberg de Fausto.
Como el trípode (no hace falta que explique el por qué del apodo) hay muchos jugadores que no han sabido llevar su vida y triunfar en el exterior, o más acertado seria decir que no han sabido cómo comportarse en este.
Freddy Rincón, otro de los grandes jugadores de la década del 90 del fútbol colombiano que entre sus logros más grandes está haber jugado en el Real Madrid (aunque no triunfó), campeón del Mundial de Clubes con Corinthians siendo capitán y figura del equipo y, desde finales del año pasado, ser parte del salón de la fama del equipo paulista. Pero al parecer la fama que ganó en Brasil se le subió a la cabeza, y no supo manejar todo el éxito que adquirió por su espectacular juego. Hoy en día sigue en dicho país, pero no puede salir de este porque espera el fallo de la corte después de haber estado preso por testaferro y nexos con el narcotráfico.
Adolfo Valencia no se queda atrás. El tren llegó al Bayern Munchen en donde fue campeón y goleador del equipo, pero por supuestos problemas con el idioma y el frio, decidió marcharse. Desembarcó en el Atlético de Madrid, en donde tuvo roces con el presidente del conjunto colchonero, al que según este, amenazó de no rendir al máximo y de hacer lo que quisiera. Al final de la temporada volvió al país para luego desfilar por muchos equipos alrededor del mundo, pero nunca tuvo otra oportunidad de brillar en algún grande europeo.
El caso más reciente es el de Teófilo Gutiérrez. El barranquillero da mucho de qué hablar en Argentina, tanto por lo futbolístico como por lo visto fuera de la cancha. Su relación con la prensa por motivos extra futbolísticos comenzó cuando, sin permiso alguno, se regresó de Turquía aduciendo que sufría constantes desmayos.
El Trabzonspor (su club en ese momento) peleó para volver a traerlo, ya que había llegado como estrella y el tercer mejor goleador del mundo. Un tira y afloja que terminó con Teo cargando sus maletas para Argentina, en donde Rácing fue su nuevo destino. Se acopló rápido y gracias a sus buenas actuaciones y goles se convirtió en el ídolo académico, además de despertar admiración en el resto del país.
Pero el ex - Junior decía lo que pensaba y no pensaba lo que decía, y muchas veces ha sido portada por las cosas que salen de su boca. Peleas con sus compañeros, empujones a árbitros, declaraciones fuertes contra el equipo y contra técnicos han sido parte de su día a día.
Como estos hay bastantes jugadores que no han sabido cómo manejar su carrera futbolística. Podemos mencionar a René Higuita, Jairo Castillo, Johnnier Montaño o Dayro Moreno, pero hay aun muchos más que si han pensado con cabeza fría, y han podido triunfar en tierras extranjeras. Carlos Valderrama, Radamel Falcao García, Juan Pablo Ángel, Iván Ramiro Córdoba, Oscar Córdoba, Mario Alberto Yepes, Luis Amaranto Peréa o Jorge Bolaños son solo unos ejemplos.
Ahora emigró Carlos Bacca, el actual goleador del futbol colombiano debería estar llegando hoy a su nuevo club, el Brujas de Bélgica.
El espera que este sea otro trampolín para algún grande de Europa, continente al cual antes de partir prometió orden. Esperemos que así sea y, al igual que los últimos nombres escritos en este texto, podamos hablar de él por sus buenas actuaciones dentro de la cancha.

viernes, 13 de enero de 2012

Supercalifragilisticoexpialidoso

El 24 de Junio de 1987 en un barrio de la ciudad de Rosario en Argentina nació la figura más grande del fútbol. Lionel Messi ganó este lunes su tercer Balón de Oro (y solo por agregar un dato) de manera consecutiva.

Ese niño que inició en Newell´s Old Boys y al que River Plate desechó porque tenía problemas de crecimiento y el costo del tratamiento era muy dispendioso, decidió emigrar a España junto a su padre, y con tan solo once años, perseguir su sueño.

Hoy, trece primaveras más tarde,  logró superar en cantidad de este galardón a figuras históricas como Ronaldo, Keegan, Rummenigge o Beckenbauer, y nada más está igualado con los inmortales Van Basten, Platini y Cruyff. A Pelé, Maradona, Di Stefano y el resto de figuras de las épocas de antaño las conozco nada mas por videos, pero basándome en los títulos ganados, en la edad que tiene el argentino de 1,69, de estatura y en el juego desorbitante que brota de sus pies, puedo decir que estamos ante el mejor jugador de la historia del fútbol. Cinco Ligas Españolas, igual cantidad de Supercopas de España, una Copa del Rey, tres Champions League, dos Supercopas de Europa y un par de Mundiales de Clubes, todos estos con el Barcelona, y un Mundial Sub 20 y un Oro Olímpico con la albiceleste hablan por sí solas. Si a esto le sumamos la infinidad de distinciones individuales a tan corta edad, no podríamos compararlo con algún otro mortal.

Muchos aducen a que todavía le falta ganar un mundial de mayores para poder ser considerado como el mejor de todos los tiempos. Yo también lo creo, es necesario tener que llevar a su país a lo más alto de la gloria, para poder probar las mieles de que el mundo se le arrodille ante sus pies.

Todavía no entiendo como hay gente que no acepta las cosas, especialmente sus compatriotas, a los que parece no enorgullecerles sus acciones. Yo, que he vivido las dos caras de la moneda, vivir en un país donde a Messi nada más se le puede admirar por su juego mágico (al igual que en todo el mundo), y estar en su natal Argentina, en donde muchos lo defienden y otros lo crucifican por supuestamente no querer al país. Le critican por no cantar el himno, que no siente la camiseta, le dicen que no es argentino, que lleva más tiempo allá que acá, que nunca jugó en un club de su país; un sinfín de excusas para desprestigiarlo. Pero si Lio, después de pasar más años en el país ibérico, donde le brindaron toda la ayuda que necesitaba, que en el sudamericano, donde le dieron la espalda, decidió ponerse la camiseta de franjas azul y blanco es por algo. Es porque la quiere, y aunque no haya sacado campeón de la UEFA al Napoli y del mundo a Argentina como hizo Maradona, no le pueden quitar la calidad de jugador que es.

Messi es uno de esos seres tocados con una varita mágica, un jugador que deleita observar, que hay que admirar, del que hay que estar orgullosos de haber compartido siglo con él y deleitarse de su juego exquisito, alguien que en un minuto le da vuelta a un partido, un fuera de serie, alguien sencillo, callado, que sigue siendo ese niño tímido y solitario, ese chico que todavía tiene que ganar el mundial para que cada habitante del planeta lo reconozca como el mejor de todos los tiempos. Es un jugador supercalifragilisticoexpialidoso.

domingo, 8 de enero de 2012

El 2011 En Retrospectiva

Se acabó un 2011 con muchas cosas positivas y otras que analizar en el deporte colombiano. En un gran evento, de calidad estratosférica, se jugó el mundial sub-20 en nuestro país. Una fiesta completa en toda Colombia, en donde se estuvo a la altura dándole una grandísima imagen a todos los continentes.
Ya en materia deportiva el equipo nacional quedo eliminado en cuartos de final por México, aunque nos augura un buen futuro, con grandísimos jugadores como lo son James Rodríguez, quien ya es titular en las mayores y deslumbra en el Porto, Luis Fernando Muriel que ya esta ganándose elogios en la Serie A, y Michael Ortega quien está saliendo de una lesión en el Bayer Leverkusen de Alemania.
Y para seguir hablando de la tricolor, la selección de mayores tiene un gran dilema. Llegó a la Copa América como favorita, pero cayó en los cuartos de final ante Perú. Luego vino el descalabro del Bolillo y la federación decidió que lo mejor era que no siguiera. Se comenzó una búsqueda de nuevo entrenador y ante la negativa de todos se decidió cederle la dirección técnica al segundo al mando de Hernán Darío Gómez: Leonel Álvarez. El ex mundialista comenzó muy bien, ganando en Bolivia, pero un empate y una derrota ante Venezuela y Argentina respectivamente en Barranquilla, provocaron que le cortaran la cabeza. Comenzamos el 2012 sin técnico, muchas dudas y sin un plan de trabajo para lo que se avecina.
En el fútbol mundial muchos de nuestros jugadores están en boca de todos, como el samario Falcao García, quien tras romper el récord de más goles en la Europa League y ser elegido segundo mejor goleador del año, se codea con Messi y Ronaldo en la liga española. Otros, como Teo, dan mucho de qué hablar en las canchas, pero sus actitudes fuera de ellas son muy cuestionadas.
Ya en el plano local el primer torneo dejó campeón al Nacional, mientras que el segundo le dio la corona a nuestros vecinos rojiblancos en una grandísima final con el Once Caldas, equipo que completa el podio de los equipos que nos van a representar en la Copa Libertadores. Por la Copa Postobón se coronó campeón Millonarios tras vencer en la final al Chicó, y tanto los azules, como La Equidad, Tolima y Envigado jugarán la otra mitad de la gloria. Pero la verdadera sorpresa de este año es el descenso de un histórico, del club más grande del país, que cuenta con trece estrellas y cuatro subcampeonatos de la Libertadores.
Sí, estamos hablando del América de Cali. Los escarlatas sumaron varios torneos de malos manejos administrativos, desilusiones futbolísticas y pagando los platos rotos de sus nexos con algunos capos de la droga en el pasado. Llegó a la promoción, y pasó lo más temido. Patriotas de Tunja fue su verdugo y, por penales, mandó a la B a los diablos rojos. Ahora en la segunda categoría del fútbol colombiano se encontraran grandes equipos como el Bucaramanga, Cortuluá, Pereira y el Unión Magdalena, quien ya va a sumar su séptimo año consecutivo y noveno en la división de plata.
En los Panamericanos nuestros deportistas dejaron muy en alto el nombre del país. Teníamos como misión quedar entre los cinco primeros. Quedó en la sexta posición pero con un increíble progreso. Además si contamos que entre los primeros ocho países los cafeteros éramos los que menos participantes teníamos, y por lejos, es un punto a favor. Los nuestros sumaron 24 medallas de oro, 25 de plata y 35 de bronce para un total de 82 preseas. En atletismo, levantamiento de pesas, ciclismo y patinaje somos potencia, especialmente las últimas dos, aunque se han descuidado algunos otros deportes como el boxeo. Un ejemplo es Mariana Pajón, oro en BMX y campeona del mundo. Muchos récords rompieron los nuestros, otros ya están instalados en Londres 2012, y muchos más están cerca de no perderse la cita orbital.
El tenis colombiano dio unos grandes pasos en este 2011. Robert Farah se corono campeón en sencillos de los Panamericanos y en dobles haciendo pareja con Juan Sebastián Cabal. Este último llegó a la final por equipos de Roland Garros mostrando un grandísimo nivel teniendo de compañero al argentino Eduardo Shwank. En Wimbledon y en US Open la dupla colombiana llegó a segunda y tercera ronda respectivamente.
Santiago Giraldo sigue como nuestro mejor embajador en el deporte blanco. Este año alcanzó a ubicarse 44 del mundo, aunque ahora mismo está 45, convirtiéndose en nuestro segundo mejor rankeado en la historia tras Iván Molina en los años 70. El pereirano llego a su primera final de torneo ATP y, junto con Alejandro Falla y el resto de equipo, estamos otra vez en el grupo I de la Zona América, es decir que en este 2012 lucharemos por entrar al Grupo Mundial.
Por último, nuestros representantes beisbolistas siguen dando de qué hablar en la MLB. Este año debutó en la gran carpa el cartagenero Julio Teherán, y se continúan firmando muchos prospectos en busca de los nuevos Renterias y Cabreras.
Se viene el 2012, con muchos objetivos deportivos, con muchas misiones para nuestros compatriotas, y esperemos, que como siempre, ondeen nuestras banderas en el exterior, y nos hagan sentir orgullosos cuando suena nuestro himno alrededor del mundo. ¡Éxitos para todos!.

Protagonistas de Novela

El Junior del segundo torneo del 2011 se va a recordar por ser un equipo batallador, que nunca dio una bola por perdida, que nunca se podía dar por muerto, que nos hizo sufrir más que nunca y que nos hizo gritar campeón por séptima vez. En este texto daré una opinión acerca de los jugadores que jugaron con mayor regularidad, pero quiero agradecerle a toda la nomina, desde los que más participación como Viera y Bacca, hasta a los que no vieron un minuto como Delgado o Reyes. A todos ellos, infinitas gracias por esta inmensa alegría, es un torneo que nunca voy a olvidar.


Sebastián Viera: Ídolo. Crack. Literalmente un ángel que llegó a Barranquilla para custodiar la portería rojiblanca y gracias a sus actuaciones se metió a los hinchas en el bolsillo y pudimos celebrar en diciembre. Tuvo errores como cualquier ser humano, pero la cantidad de gritos de gol que ahogó es interminable. Apareció cuando más se le necesitó, y nos ganó una infinidad de puntos ya que la defensa del Junior era muy permeable. Los penales a Mayer y Pajoy, y ese cabezazo que le sacó a Del Valle en la final son acciones que nunca se nos van a olvidar. A ti, eternas gracias.


Anselmo De Almeida: Durante el todos contra todos fue el defensa más regular del Junior. En la serie contra Chicó tuvo un error garrafal, por suerte se pudo remontar. Siempre corría todas las bolas, iba seguro por arriba, despejaba el balón cuando tocaba y sabía jugar por abajo. Generó acciones ofensivas con sus salidas y cabezazos y hasta convirtió un gol.


Andrés Felipe González: Empezó bajo de nivel o falto de ritmo, pero con el pasar de los partidos se fue ganando a pulso a la exigente fanaticada tiburona gracias a sus buenas actuaciones. No es un defensa rápido, pero eso lo contrarresta con su buen posicionamiento, gran anticipo, liderazgo, seguridad y sus quites deslizantes. Fue muy importante en el tramo final del torneo, especialmente en los cuadrangulares.


Braynner García: El bombero del Junior apareció otra vez cuando había que apagar los incendios. Durante el torneo rindió muy bien pero se graduó con honores en el partido contra Chicó por cuartos de final. Entró por Anselmo cuando este se lesionó y sacó absolutamente todo. Por arriba, por abajo, por cualquier parte por donde intentaran ahí estaba Braynner. Sorpresivamente al partido siguiente no jugó, y regresó en la vuelta contra Millonarios para ser un muro impenetrable. Se tuvo confianza y pateó en la tanda de penales para la clasificación a la final, en donde en el partido de ida tuvo un error de anticipo en el segundo gol del Once Caldas, pero de resto muy bien. En el último partido cambió de posición (que raro). Medio de contención, labor en donde pasó el examen.


Jaider Romero: Acepto que siempre que lo veía en la alineación titular sentía miedo. Nunca me generó confianza, una confianza que se ganó con el pasar de los partidos (aunque mi confianza valga tres pesos y a nadie le importe). Rapidísimo, aceptable en defensa, con mucha salida y trescientos pulmones. La palabra cansancio no existe para él, llegaba a la línea de fondo y siempre hacía lo mismo: un mal centro. Esto último siempre ha sido su talón de Aquiles, aunque gracias a Dios contra Chicó lo hizo mal ya que si iba bien dirigido nunca hubiera pegado en la mano del defensor del conjunto ajedrezado.


Juan David Valencia: De lo mejor del Junior en el segundo torneo. Volvió a ser ese defensor del DIM que lo llevó a la selección. Mucha salida, buen toque, excelente pegada en los tiros libres que le valió para hacer varios goles muy importantes. Se demoraba a veces en bajar, pero siempre rindió muy bien. Banqueó por completo a Fawcett.


Luis Narváez: El mejor refuerzo que trajo Pinto. Hace rato no se veía un mediocentro defensivo con tan buen nivel en Barranquilla. Además es alguien de la casa, que quiere la camiseta y la siente. Cada vez que no pudo jugar se sintió mucho la baja. Importantísimo para recuperar y darle salida al equipo. Cumplió su sueño: salir campeón en el equipo de sus amores.


Jossymar Gomez: Otra vez el samario fue de los más rendidores de los rojiblancos. Corre toda la cancha, con una muy buena salida y gran manejo de balón que le sirvió para ser un excelente aliado de G10. Formo una excelente dupla con Narváez en el medio del campo y ya consiguió su segunda estrella con el Junior a pesar de que no pudo estar en la final por una lesión.


José Amaya: Con altibajos a lo largo del torneo, en las finales demostró por qué lo trajeron. Durante el todos contra todos no rindió a buen nivel pero mostró que la experiencia se tiene que ganar, y el ringo le enseñó al país cómo se ganan estos juegos y que esta no es su quinta estrella en vano. Inteligente, calculador, quitó una infinidad de balones y fue fundamental para poder alcanzar un nuevo campeonato.


Vladimir Hernández: La gran revelación de este Junior 2011. El pequeño jugador nacido en Arauca fue una pesadilla para todos los equipos. Con su gambeta complicó a todas las defensas (le cometieron el penal para el primer gol en la final ante Once Caldas) y apareció en los momentos más importantes del equipó. Su golazo al Chicó, el cabezazo contra Millonarios, y el empate transitorio en la final quedaron inmortalizados en la retina de todos los junioristas.


Luis Carlos Ruiz: El samario tiene una historia de amor y odio con el pueblo rojiblanco. Es verdad que muchas veces no toma la mejor decisión en la última puntada, pero no se le puede borrar el sacrificio que tiene. Corre toda la cancha y todo el partido, ayuda en defensa en repetidas ocasiones, y usa la banda derecha como si fuera una autopista. Suda la camiseta más que muchos jugadores. Quiere al equipo que es muy importante y las ganas de mejorar están presentes.


Víctor Cortés: El vallecaucano tenia los dos pies afuera pero no le pudieron encontrar equipo. Le dijeron que no iba a ser tenido en cuenta pero en la tercera fecha Pinto lo utilizó por primera vez e hizo tres goles. Unos días mas tarde hizo otros dos. Fue el segundo goleador de Junior y tuvo buenas actuaciones. En la recta final por necesidad lo pusieron de contención y rindió. No está en sus mejores años, pero ayudo mucho al equipo y ya consiguió su segunda estrella como rojiblanco.


G10vanni Hernández: El ídolo de la afición no defraudó cuando lo necesitamos. No tuvo un buen comienzo de campeonato, se lesionó, pero cuando volvió estuvo intratable. Regresó con la magia que enamoró a todo un continente, esos pases milimétricos, esos enganches que rompen cinturas, que hacen pasar a los defensores como carritos de paleta en bajada, como lo hizo en el golazo para el 3-0 ante Millonarios. A todo esto se le suma el amor por la institución, por la ciudad, por la gente. 35 años pero sigue corriendo como un pelaito. Ayuda en defensa, se tira al piso, juega de cinco si se necesita; todo lo que se le criticaba en la selección lo demuestra ahora. Un crack total.


Carlos Bacca: Para el porteño no hay palabras de agradecimiento que valga. Goleador de la Liga Postobón y Copa Postobón y líder de asistencias de la primera. Ya no es solo un killer, también es alguien que juega para el equipo. Segunda vez que gana la bota de oro de Colombia, al igual que la copera. Le dio muchísimos puntos al Junior y en las semifinales explotó. Gol y pase gol vs Chicó, dos asistencias ante Millonarios y la nada despreciable de tres pases a la red y un "tomá y hacélo" en la gran final. Llegó el momento de su partida, él lo dijo y se lo merece. Muchas veces se le ha caído la posibilidad de ir al exterior, así que ojala esta vez sí se dé. El Junior va a sentir mucho su baja en la Copa Libertadores, pero no pueden privar a Bacca de que abra sus alas. Mucha suerte para él, y espero que no sea un adiós, sino un hasta luego.